Ya sea para resolver un crimen o encontrar una explicación para una circunstancia desconcertante, el elenco principal, de buena gana o de mala gana, se convierte en investigadores que deben trabajar para responder quién, qué, por qué y/o cómo del dilema actual. La narrativa de las historias de misterio siempre se basa en recopilar pruebas, identificar sospechosos y teorizar posibles escenarios para lo inexplicable, antes de finalmente capturar al perpetrador o resolver la situación actual.