En un mundo en el que existen los espíritus, solo las doncellas de corazón puro pueden formar un contrato con ellos, convirtiéndose así en elementalers. Aunque se pensaba que era imposible que un hombre se convirtiera en elementaler, de alguna forma Kazahaya Kamito consigue formar un pacto con un espíritu. Siendo el único elementaler del mundo, es enviado a la Academia Espiritual Areishia, una institución de élite a la que las más nobles familias envían a sus hijas para entrenar. Allí tendrá que encontrar más información sobre el pacto que tiene con su espíritu, pero el director de la academia le dice que solo podrá conseguirla si participa en el torneo de elementalers, el Bladedance.